Resumen
La historia de David y Betsabé nos muestra el pecado de David y el fracaso de no obedecer la Palabra de Dios. A pesar de todo el progreso que David había hecho estableciendo el reino de Dios en cumplimiento de sus promesas de pacto, David no era el rey eterno de Dios que finalmente llevaría al pueblo de Dios al lugar y la presencia de Dios. En este pasaje, vemos que el enemigo está adentro, los ciclos de pecado, y cómo Jesús gana.
Puntos Importantes
Aprendiendo de David
La guerra interna (Santiago 4:1-10). El tiempo de inactividad es el tiempo de ídolos.
Los ciclos del pecado (Santiago 1:14-15). El esfuerzo propio contra el pecado no es efectivo. Interuptores del ciclo del pecado:
Toma el escape (1 Corintios 10:13)
Confesar a tu grupo comunitario
Arrepentirse
Matar el pecado por el Espíritu (Romanos 8:13)
Permanecer
Reproducir la cinta (¡piensa en los efectos del pecado contra Dios y los demás, y luego corre a disfrutar de la vida en Cristo!)
Jesús Gana (Romanos 3:21-26). Solo Jesús puede limpiar un alma engrasada. No puedes pecar los brazos extendidos de Jesús.
Mirando a través de David
A pesar de todo el progreso en la realización de las promesas del pacto de Dios en y a través de David, 2 Samuel 11 nos muestra que necesitamos un David mejor para cumplir las promesas del pacto y marcar el comienzo del reino de Dios. El Nuevo Testamento revela que Jesús es el mejor David. Él es el rey perfecto y justo que nunca ha pecado. Ahora, a través de confiar en Él, Su vida perfecta y obediente, el sufrimiento, la muerte, la resurrección y la ascensión, estamos muertos al pecado y vivos para Dios en Cristo Jesús. De hecho, somos liberados de las tinieblas y transferidos a Su reino (Colosenses 1:13-14). Y si eso no es suficiente, tenemos nuevos corazones y el don del Espíritu Santo para fortalecer y asegurar nuestra fe y obediencia en Él para que podamos vivir.
Aplicación
- ¿Dónde estás tentado a pecar? Luis Caceres nombró tres categorías del pecado a partir de 1 Juan 2:16: medida, tesoro y placer. ¿Cuál estás tentado a perseguir?
- ¿Cómo estás tratando de limpiarte con tu propio esfuerzo?
- Por el poder del Espíritu de Cristo que habita en ti (Romanos 8:1-17), ¿cómo puedes romper con el ciclo del pecado? ¿Hay algún pecado que tengas que confesar?
- Lee Romanos 6:1-14. ¿Qué recursos tenemos en Cristo para ayudarnos a luchar contra el pecado?
