Puntos Importantes
1 Corintios 12 es el pasaje más extenso de la Biblia sobre los dones espirituales. Pero el contexto más grande de 1 Corintios 12 es que la iglesia de Corinto tenía mucha decadencia espiritual . No era una iglesia sana. El apóstol Pablo sabía que no era una iglesia sana por la forma en que estaban manejando mal los dones espirituales. Estas son las tres preguntas que debemos responder para diagnosticar nuestro estado espiritual:
¿Es Jesús el Señor de nuestra iglesia (1 Corintios 12:1)?
Una conversación sobre los dones espirituales sólo tiene sentido para las personas que tienen el Espíritu Santo viviendo en ellas. Sabrás si el Espíritu está en ti y si estás viviendo rendido a Él si Jesús es Señor en tu vida y en nuestra iglesia. ¿Te has apartado de tu pecado y has confiado en Cristo?
Queremos que Jesús sea la razón por la que dejamos este lugar cada semana y salimos a nuestras comunidades a compartir el evangelio porque Jesucristo es el Señor.
Si no eres cristiano, debes saber que Jesús murió como un criminal, no por su propio pecado porque no tenía pecado, sino por nuestro pecado, y resucitó de entre los muertos como un rey conquistador. Cuando triunfó sobre Satanás, el pecado y la muerte mediante Su resurrección, demostró ser Rey sobre todos los reyes. Si no eres cristiano, queremos que confíes en Él y lo conozcas personalmente.
¿Se están desplegando los dones del Espíritu en nuestra iglesia (1 Corintios 12:1-7)?
En su libro sobre los dones espirituales, Thomas Schreiner los define como "dones de gracia otorgados por el Espíritu Santo que están diseñados para la edificación de la iglesia". No son sólo talentos naturales, los dones espirituales son una habilidad divina o habilidades que se te han otorgado como dones/regalos inmerecidos sólo después de que te convertiste en cristiano. Y estas habilidades son acciones del Espíritu Santo con el propósito específico de servir, fortalecer y edificar a la iglesia en Cristo.
Cada creyente tiene al menos un don. Dios te ha dado al menos un don espiritual. Los dones del Espíritu no se pueden desplegar si no se han descubierto primero. ¿Sabes cuál es tu don o dones espirituales? Los lugares principales donde encuentra listas de dones espirituales en la Biblia son 1 Corintios 12, Efesios 4, Romanos 12, 1 Pedro 4. Ningún pasaje de la Biblia contiene una lista exhaustiva.
Los dones existen para el bien común. La razón por la que tienes un don espiritual es con el propósito de servir, fortalecer y ayudar a la iglesia a ser más saludable. Los dones son dados por el Espíritu e impulsados por el servicio. Ser un buen administrador del don que Dios le ha dado significa utilizar su don, o sus dones, en la Iglesia para que este lugar sea saludable y fortalecido. Si tienes el Espíritu Santo viviendo en ti, entonces desde un corazón nuevo en Cristo querrás usar los dones que Él te ha dado para fortalecer la iglesia en Cristo.
*14 dones espirituales basados en 1 Corintios 12, Efesios 4, Romanos 12, 1 y Pedro 4: *
1. Liderazgo: la capacidad de proporcionar a la iglesia visión, dirección y supervisión para que la iglesia pueda cumplir su propósito.
2. Administración: La palabra se usa para un piloto o un capitán de una embarcación. Es la capacidad de ayudar a dirigir la iglesia hacia el cumplimiento de su propósito. Liderazgo y administración van de la mano. Una fuente describió a uno como el propietario del barco y al otro como el capitán del barco. El armador determina el destino. El capitán determina cómo llegar.
3. Enseñanza: la capacidad de comprender, explicar e instruir a partir de la Palabra de Dios.
4. Conocimiento: Este don está estrechamente asociado con el don de la enseñanza y la sabiduría. Es una habilidad excepcional para comprender las cosas profundas de Dios reveladas en Su Palabra combinada con la capacidad de compartirlas con los demás.
5. Sabiduría: Este don también está estrechamente asociado con el don de enseñar. Es la capacidad de aplicar hábilmente la Palabra de Dios a las situaciones de la vida y a las necesidades específicas que surgen en la iglesia.
6. Discernimiento: la capacidad de distinguir entre lo verdadero y lo falso... o la capacidad de discernir entre la verdad y la mentira. Algunos se refieren a este don como el don de distinguir espíritus. Es saber qué es de Dios y qué es del engañador.
7. Exhortación/Ánimo: una habilidad única para edificar y fortalecer a aquellos que son débiles en la fe o que necesitan consuelo o corrección.
8. Pastorear/Cuidar: una habilidad especial para quienes ocupan el cargo de pastor o anciano para cuidar, proteger y cultivar el bienestar espiritual de las personas en la iglesia.
9. Fe: No estamos hablando de fe salvadora ya que cada creyente tiene una fe salvadora. Estamos hablando de una confianza extraordinaria e inquebrantable en la soberanía, el poder y las promesas de Dios y una expectativa de que Él se moverá... incluso si parece imposible.
10. Evangelismo: Habilidad especial para comunicar de manera atractiva y sin esfuerzo el mensaje del evangelio a los no creyentes.
11. Apostolado: este es un don que era solo para los que vieron al Señor resucitado y los encargó él mismo. Este regalo se limitaría a los 12 apóstoles y a un número pequeño de personas más. En un sentido menos estricto, esto puede referirse a una persona que tiene una habilidad única para llevar el evangelio a lugares a los que aún no ha llegado.
12. Servicio: una habilidad excepcional para identificar y satisfacer necesidades prácticas en el cuerpo para que otros sean libres de ministrar a otros con sus dones y la misión de la iglesia avance.
13. Misericordia: capacidad especial para demostrar profunda compasión y sensibilidad hacia quienes sufren.
14. Dadivosidad: Una notable tendencia a compartir tus recursos con gusto en beneficio de los demás y sin necesidad de verlos devueltos.
*¿Están todos los miembros entregados a la visión y misión de la Iglesia? (1 Cor.12:14-25) *
Si es miembro de Watermark, Dios le ha dado un regalo con el propósito de servir, fortalecer y mejorar este cuerpo de creyentes. Hay que considerar que no se trata solo de que el cuerpo te necesite. Tú y yo necesitamos el cuerpo.
Jesús es la cabeza del cuerpo, lo que significa que nunca podrás experimentar plenamente la presencia, el poder y los propósitos de Jesús si no estás conectado física y visiblemente a Su cuerpo, la Iglesia. La Iglesia es el plan A de Dios, y Dios no tiene un plan B. El cuerpo te necesita y tú necesitas al cuerpo.
Aplicación
- ¿Es el Señor Jesucristo preeminente en tu vida? ¿Él ocupa el primer lugar? ¿Hay alguna área de tu vida en la que no se le vea y no se viva como Señor?
- ¿Es importante en tu vida? ¿Él te importa y es parte de tu vida durante la semana, pero Él no está a cargo de tu vida?
- ¿Es él irrelevante en tu vida? ¿Los domingos por la mañana son realmente la única vez que Jesús es parte de tu vida; de lo contrario, Él no tiene relevancia para nada más para ti?
- ¿Cómo da forma al saber que necesitas el cuerpo y que el cuerpo te necesita a la forma en que usas tus dones para edificar a los demás en Cristo?
- ¿Estás administrando el(los) don(es) que Dios te ha dado para fortalecer y edificar a otros en Cristo en nuestra iglesia? ¿Qué dicen otros que te conocen y/o tu grupo comunitario que podrían ser tus dones espirituales?
Cómo descubrir y desplegar tu(s) don(es)
Ríndete a Jesús - Por la gracia de Dios y el Espíritu que vive en ti, vive una vida arrepentiéndote del pecado, confiando en Cristo, permaneciendo en Él, tomando su Palabra y viviendo la vida con Su pueblo.
Únete a la Iglesia - Si no eres miembro, tu siguiente paso es simplemente conectarte con el cuerpo.
Ora - Somos una iglesia de oración. Siéntate con el Señor y pídele que te abra los ojos a cómo te ha dotado.
Busca el consejo *- Toma la lista de los dones espirituales y compártela con tu grupo comunitario, y anímense unos a otros con la forma en que ven los dones del Señor en la vida de los demás.
*Empieza a servir - Dios trabaja a través de Su Espíritu que vive dando nuevos deseos que quieran servirle. Una de las mejores maneras de descubrir tus dones es empezar a servir en áreas que te interesan y ver lo que Dios te muestra. Comprómetete y responde a las necesidades de la iglesia y, mientras sirves, el Espíritu te ayudará a ver lo que Él te ha conectado para hacer.
